Sigamos cuidando nuestro sistema de enseñanza

Habaneros y cubanos todos convivimos con cosas… que en ocasiones no apreciamos en toda su dimensión porque nos son cotidianas y habituales. Pero cuantos ansían en este mundo tener un sistema de enseñanza como el que poseemos, si si ese incluso en las condiciones de calidad, de que disponemos HOY. 

Yo no les voy a contar que pasa en algunas de nuestras escuelas y con nuestros maestros.. usted lo sabe…Pero, créame que incluso esto que padecemos es un raro anhelo en nuestra subregión, incluso en aquellos Estados con más aparente avance que el nuestro. Es para muchos una quimera la atención y educación que reciben los habaneritos y cubanos en la primera infancia entre cero y 6 años de edad. 

Me comentaba una mexicana admirada que en su país, por ejemplo las escuelas públicas dan lecciones hasta el mediodía y después.. a arreglárselas como se pueda. Pues las privadas.. NO son ni remotamente para todos. En fin..   

Son también sueños en mucha de nuestras partes de América latina que los niños y niñas accedan a la enseñanza gratuita y obligatoria. 

Seguro a usted se le habría oprimido como a mi el corazón al ver en vivo y en plena super avenida del Distrito Federal de México a cositas que no alzaban un metro del piso buscando sustento para ellos y sus hogares. Para ellos la escuela está bien distante.. 

Claro aún en La Habana tenemos que seguir trabajando para que todos esos derechos se sigan ejerciendo y su calidad NO siga yendo en picada. 

No por consignas ni planes… sino por la obvia realidad de que de la instrucción que reciban HOY nuestros pupilos dependerá el presente y futuro de todos.

Por eso podemos estar orgullosos de que la Organización de Naciones Unidas para la educación, la ciencia y la cultura, UNESCO nos haya reconocido como el único país de América y el Caribe en cumplir con los objetivos de Educación para todos 2000- 2015. 

Pero eso no es para arrazcarnos el ombligo.. sino para desterrar aquello que está mal hecho y preservar y mejorar lo que hoy nos distingue