miércoles, 29 de mayo de 2019

El ciclo de la vida en Nueva Orleans: una mirada abierta a los ojos de habaneros y visitantes


Olivia Vega quiso compartir con Habaneros y visitantes una muestra de lo que su lente captó en Nueva Orleans. Una ciudad en la que tiene raíces y ha conformado en ella ese amor por lo afro. Sus ancestros vinieron al norteño país y la ligan con Cuba, Puerto Rico, Dominica, San KItts and Nevy, por mencionar algunos. Ella es una mezcla, bien proporcionada de todo ello. Se le da esa sonrisa franca que tenemos muchos cubanos, ese andar salamero, quien sabe de donde y facilidades para el baile acompasado del latino. Su muestra de 12 instantáneas es una suerte de recorrido por el ciclo vital.

La vida lo más feliz posible, el celebrar a viva voz, e incluso el morir de forma maravillosa son algunas de las etapas del ser humano que Olivia busca resaltar en sus piezas.  negro que convive en Nueva Orleans, sus gentes, el carnaval se pueden apreciar hasta el 11 de junio en la Galería del Proyecto Socio Cultural José Martí, de Prado entre Neptuno y Virtudes en los límites entre Centro Habana y la parte vieja de la principal urbe cubana. Olivia se siente más que feliz, de esta su segunda visita a Cuba como parte de sus estudios socioculturales sobre la influencia de la sociedad y la cultura en la vida de sus habitantes.



En este viaje como en el anterior la acompaña Deja Dennis, una joven estudiante de la Universidad de Javier en Lousiana, quien acompañó con hermosas palabras las instantáneas que salieron de lo más profundo del corazón de esa cubana-americana-puertoriqueña en fin latinoamericana, que es Olivia Vega. No le cuento más pues prefiero que usted aprecie por si mismo este pedazo de la vida que ha traído a la Habana la joven artista y fotógrafa, que intenta con su lente capturar momentos y sentimientos. Selecciona para su muestra a Nueva Orleans con su carga que le conecta a sus ancestros. En su quehacer hay siempre una suerte de viaje al reconocimiento y redescubrimiento. Porque es La Habana esa pieza que late en su multicultural corazón.

martes, 7 de mayo de 2019

La Habana revitalizará su Barrio Chino

La capital cubana, tiene como muchas otras ciudades del mundo su Barrio Chino, que por fortuna es renovado por estos días en ocasión del aniversario 500 de la fundación de la Villa de San Cristóbal de La Habana.

La barriada de poco más de 5 cuadras incluye comercios, fondas, lavanderías, un cine-teatro, y restaurantes, algunos de los cuales ya ofrecen como atractivo acceso a los servicios de internet mediante wifi, como cortesía agregada.

El pequeño en extensión territorio llega hasta el impetuoso edificio del Capitolio Nacional de Cuba y se extiende desde la calle Amistad hasta la de Dragones.

En esta última arteria se levanta impetuosa la muralla o portón que identifica el inicio de la congregación.

La majestuosa entrada del barrio fue financiada por el gobierno de la República Popular de China y elaborado con hormigón y materiales traídos de ese país de Asia.
La estructura fue nombrada “Pórtico de la Amistad” y tiene 3 toneladas de peso, 16 metros de ancho y 12 de alto.

Se considera una de las mayores obras arquitectónica vinculadas a la milenaria cultura fuera de China.

En sus inicios el barrio chino de La Habana llegó a ser uno de los más importantes del mundo, después del de San Francisco en California, Estados Unidos.

En él se instalaron poco más de 150.000 chinos entre 1847 y 1874.

Hoy es escasa la presencia de ese grupo étnico y el barrio se conserva gracias al espíritu de algunos ancianos chinos que aún viven allí.

A inicios del siglo XX, en las 10 manzanas del barrio residían apenas unos 10.000 chinos.

En esos tiempos crecieron allí los establecimientos comerciales, también se abrieron espacios para la venta de víveres, farmacias, sederías, cines y teatros para representaciones de operística asiática.

El barrio chino también contó con una cámara de comercio que funcionaba como bolsa de valores.
Los chinos de La Habana contaron con un cementerio propio ubicado fuera del Barrio en áreas cercanas a la Necrópolis Cristóbal Colón.

El triunfo de la Revolución Cubana en 1959 resultó en un éxodo masivo de chino-cubanos hacia Estados Unidos, que hizo caer bruscamente el número de habitantes del barrio.

En la década de los 1990 algunos locales comerciales del barrio fueron remozados.

También por esa época los habitantes del barrio comenzaron a celebrar el año nuevo lunar chino y los aniversarios de la llegada de los primeros inmigrantes.


El Grupo Promotor del Barrio Chino fue creado en la década de 1990 para revivir las raíces de esa civilización. En tanto, la Escuela de la Lengua y Artes China abrió sus puertas en 1993

En La Habana cuenta con el Casino Chung Wah, una institución que agrupa a toda la comunidad china del archipiélago.
Tiene su sede en La Habana y funciona desde 1893 con el objetivo de ayudar a los inmigrantes a resolver sus problemas.

También existe la Casa de las Artes y Tradiciones Chinas escenario de seminarios, exposiciones y coloquios, y otras actividades como arte culinario, danza, artes marciales, pintura y escultura.

Kwong Wah Po “China Brillante”, en lengua china, único periódico cubano que se edita en idioma chino, volverá a ver a luz.

El tabloide, posee cuatro páginas: tres de ellas en chino y la última en español aspira a recuperar su tirada original de alrededor de 600 ejemplares al mes.

Por estos días se llevan a cabo labores para el rescate de los inmuebles, calles y aceras que componen el Barrio Chino de La Habana como parte de las acciones que se desarrollan para embellecer la urbe en ocasión del aniversario 500 de la fundación de la Villa.

El medio milenio de La Habana dejará el aliciente de ver florecer su Barrio Chino.

El programa implica la colaboración de las autoridades políticas y gubernamentales en la rehabilitación constructiva y la renovación cultural de tan popular barriada.

Se prevé la construcción de la plaza de comercio San Fan Con, una galería de arte encabezada por la artista Flora Fong y un circuito cultural denominado “Cuchillo” en el que se incluirán restaurantes y puestos de venta de alimentos ligeros del mercado chino.