La imagen de la rampa capitalina y otros sitios de la Habana ha cambiado
para bien y para menos bien, por así decirlo.
De un lado resulta novedoso ver como
hay un grupo cada vez mayor de personas de diversas edades, pero esencialmente
de la más joven generación de cubanos que puede disfrutar de la conexión wifi a
todo lo largo de la avenida 23 desde L y hasta el malecón y en el resto de las
áreas habilitadas al respecto en la capital.
Incluso uno puede notar que el
servicio está también disponible en las intercepciones aledañas y esto permite
que sea mayor el número de navegantes en la red de redes.... pero siempre.. un
pero.
Si usted como yo los observa se ubican en áreas sin bancos, en quicios de
escaleras, barandas de metal en todo aquel espacio, que por cierto No abunda en
la zona, para colocar sus posaderas.
A todas horas se puede observar el
enjambre humano conectado a la red de redes y también a… quienes viven a costa
de todo. Si los revendedores.. Por ello una vez más me permito recordar a los
usuarios de ETECSA que el servicio ya redujo su valor por hora a 2 cuc.
Y usted
a lo mejor se contesta para si.. que también han aumentado las colas y desaparecido las tarjetas en todos
los espacios que vende ETECSA.
En fin.. que como me comentaba una especialista
de ETECSA alguien debe ponerle como decimos en buen cubano el cascabel al gato.
Y en esto coincido con ella que no pueden ser únicamente los vendedores
oficiales del servicio, quienes pongan coto a las nuevas ilegalidades que
surgen.
En mi opinión sugiero pudieran
dar una mano tanto los inspectores de la dirección de supervisión y control, DISC y también
porque NO la policía.
Los revendedores hacen casi imposible por un lado las
colas en las unidades y puntos de venta de ETECSA y por la otra se pavonean
intocables por la misma calle 23 y todas las zonas cercanas de esa y otras
áreas de la ciudad a donde es posible conectarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario